El ardor y una sensación de quemazón son los síntomas del reflujo más habituales, aunque también puedes sentir un sabor desagradable en la boca, una regurgitación ácida o dolor en el pecho.
Además, los síntomas pueden verse agravados, por ejemplo, al tumbarse o realizar algún ejercicio justo después de comer. Si es tu caso y te preguntas cómo tratar el reflujo gástrico y si hay medicamentos para el reflujo, sigue leyendo, porque en este artículo aclaramos estas dudas con todo detalle.
¿Por qué tengo reflujo?
Antes de conocer las recomendaciones para tratar esta condición, es básico entender cómo se produce. El esófago está dotado de una serie de fibras musculares situadas en su parte inferior, estos músculos, denominados esfínter esofágico inferior o EEI, impiden que el alimento masticado e ingerido suba de nuevo.
Ahora bien, cuando el anillo dotado de estas fibras musculares no se cierra como debería, el contenido del estómago regresa al esófago, lo que da lugar a los síntomas mencionados anteriormente.
Determinadas condiciones y hábitos que adoptamos en nuestro día a día pueden favorecer la aparición del reflujo gastroesofágico. Destacamos los siguientes (1) (2):
- Obesidad: esta condición aumenta la presión en el abdomen, favoreciendo el reflujo. Esto mismo puede suceder cuando utilizamos prendas de ropa demasiado apretadas en la zona de la barriga y de la cintura.
- Hernia de hiato: se trata de un trastorno que consiste en que parte del estómago pasa por la parte de arriba del músculo que hace de barrera entre el abdomen y el tórax, es decir, el diafragma. Esto explica su relación con el reflujo.
- Embarazo: puede ser un factor desencadenante del reflujo o agravar los episodios si ya se padecía. Se debe a la acción de las hormonas propias de este estado y a la presión que ejerce el feto en crecimiento sobre el estómago. En nuestro artículo Cómo tratar el reflujo en el embarazo podrás descubrir más de esta condición durante esta etapa.
- Tabaquismo: el tabaco disminuye tanto la secreción de saliva como la presión del esfínter esofágico y, además, lesiona de manera directa la mucosa del esófago, de ahí que lo podamos relacionar con el reflujo.
- Comidas copiosas o cenar justo antes de acostarse: comer en abundancia distiende el estómago y relaja el esfínter esofágico, favoreciendo el reflujo. Por otra parte, después de comer se recomienda dejar pasar al menos 2 horas antes de dormir.
- Determinados alimentos: algunos aumentan la secreción ácida, relajan el esfínter esofágico o pasan demasiado tiempo en el interior del estómago. Son ejemplos los cítricos, el chocolate, el tomate, las especias y las comidas más ricas en grasas.
- Algunas bebidas: con ciertas bebidas, como las carbonatadas o el café, sucede lo mismo que con los alimentos que hemos mencionado. También se considera un factor de riesgo el consumo de alcohol.
- Ciertos medicamentos: algunos fármacos, como la conocida aspirina, los antidepresivos, medicación para la ansiedad o para el asma, pueden ocasionar reflujo (3). Si sospechas que es tu caso, no suspendas el tratamiento por tu cuenta, pero sí contacta con tu médico.
Consejos para prevenir el reflujo gástrico
Atendiendo a los factores de riesgo que se asocian a la aparición de este problema, podemos seguir una serie de recomendaciones para prevenir el reflujo gástrico. Son las siguientes (4):
- Evita los alimentos que tienen más riesgo de producir reflujo, como el chocolate, los tomates, los cítricos, las especias o las comidas con un exceso de grasa. Por ello no abuses de los fritos y, en su lugar, recurre a cocciones suaves.
- Cuida también lo que bebes y, para aliviar el reflujo gástrico, prescinde de bebidas asociadas a la aparición de este trastorno, como las carbonatadas, el alcohol o el café.
- Come pequeñas raciones a lo largo del día en vez de comidas copiosas y espera unas 2-3 horas antes de acostarte para que dé tiempo a hacer la digestión. Mastica despacio, come con tranquilidad y establece un horario de comidas.
- Mantén tu peso ideal, para lo que te puede ayudar la práctica de ejercicio, siempre dejando que transcurra un tiempo prudencial después de haber comido. Evita agacharte sin flexionar las rodillas. De esta forma tu estómago sufrirá menos presión, lo mismo que si utilizas prendas holgadas en esta zona.
- Procura dejar de fumar si este es tu caso. Puedes buscar ayuda profesional para lograrlo.
- Duerme con la cabeza algo más elevada que el resto del cuerpo, unos 10-15 cm. Así es más difícil que puedan ascender líquidos desde el estómago.
- No te automediques, recuerda que algunos fármacos producen reflujo.
Cómo tratar el reflujo gástrico efectivamente
Aplicar las recomendaciones y los cambios en el estilo de vida mencionados anteriormente, es clave para reducir la frecuencia con la que padecemos esta molestia.
Pero, si a pesar de poner en práctica estos consejos sigues experimentando ardor, existen algunos medicamentos para tratar el reflujo gástrico que pueden ayudarte.
Este es el caso de Gaviscon Forte suspensión oral, que gracias a su doble acción 2 en 1 combate la sensación de acidez de estómago y el ardor causado por el reflujo en adultos y adolescentes a partir de 12 años.
Su contenido de alginato de sodio actúa formando una balsa protectora en la boca del estómago, que evita que los ácidos suban al esófago ayudando a prevenir el ardor causado por reflujo.
Lea las instrucciones de este medicamento y consulte al farmacéutico. Si los síntomas persisten o no mejoran después de 7 días consulte a su médico. Gaviscon Forte suspensión oral en sobres y comprimidos es un medicamento de Reckitt Benckiser Healthcare, S. A.
El contenido de este sitio web no es un consejo médico y está destinado únicamente a fines informativos.
Fuentes
- Enfermedad por reflujo gastroesofágico, Mayo Clinic
- Enfermedad por reflujo gastroesofágico. Clínica y tratamiento. Adela-Emilia Gómez Ayala. Publicado en Elsevier.
- Enfermedad por reflujo gastroesofágico. MedlinePlus
- Alta tras reflujo gastroesofágico. MedlinePlus
RB-M-94849
